Ya nadie puede negar que estamos ante una de las mayores crisis económicas de la historia. Tal vez por eso se hace indispensable buscar la mejor oferta allí donde se encuentre. Cualquier euro que se ahorre puede ser necesario en el futuro.
En este entorno en el que nos encontramos, Internet es y será una pieza clave en el ahorro familiar. Pero, ¿que ocurre en nuestro país para que el uso del comercio electrónico sea tan bajo? Desde mi punto de vista hay dos reticencias principales: no existe un contacto directo con el vendedor y nuestra información es enviada a través de la red sin saber quién hay detrás. Y claro, dar el salto a la red no es tan fácil. Veamos los pros y contras de los dos motivos antes citados para, por lo menos, perder el miedo, que no el respeto, a comprar por Internet. Leer más…